Hidalgo concluyó el año 2023 con un total de 392 homicidios, una cifra que refleja una estabilidad en los índices de violencia y defunciones accidentales en comparación con los dos años previos. La variación en el número de víctimas entre estos años ha sido mínima, con una diferencia de apenas dos casos en los comparativos anuales.

De acuerdo con los datos de la Estadísticas de Defunciones Registradas, recopiladas a partir de los registros administrativos de defunciones accidentales (homicidios culposos) y violentas (homicidios dolosos), Hidalgo mantiene una tasa de 12 homicidios por cada cien mil habitantes. Esta tasa coloca a la entidad entre las 11 con menor incidencia de homicidios en el país.

Estabilidad en las cifras, pero con antecedentes alarmantes

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) destaca que el pico de homicidios en Hidalgo durante la última década se registró en 2019, con un total de 479 incidentes. Este aumento significativo se debió, en gran parte, a la trágica explosión de un ducto de Pemex en la localidad de San Primitivo, ocurrida en enero de ese año, la cual dejó un saldo de 137 personas muertas. De estas, 69 fallecieron en el lugar y 68 más sucumbieron a las lesiones posteriormente.

Distribución por género y causas de defunción

Las causas y tipos de defunción son esenciales para distinguir entre homicidios, accidentes y suicidios. Según las cifras disponibles, de los 392 homicidios registrados en 2023, 331 correspondieron a víctimas masculinas y 49 a víctimas femeninas. En 12 casos, no se logró identificar el sexo o género de las víctimas.

Esta información es crucial para las autoridades en el diseño de políticas de seguridad y prevención de la violencia. La identificación precisa de las víctimas y las circunstancias de sus muertes permite una mejor comprensión de los patrones de criminalidad y las áreas que requieren mayor atención y recursos.

Perspectivas y retos futuros

Aunque Hidalgo se encuentra en una posición relativamente favorable a nivel nacional en cuanto a la incidencia de homicidios, los retos persisten. La estabilidad en las cifras de homicidios no debe llevar a la complacencia, sino a un continuo esfuerzo por mejorar las condiciones de seguridad y reducir aún más los índices de violencia.

Las autoridades locales y estatales deben seguir trabajando en la implementación de estrategias efectivas de prevención del crimen, atención a víctimas y fortalecimiento de las instituciones de justicia. Solo a través de un enfoque integral y sostenido se podrá garantizar un entorno más seguro para todos los habitantes de Hidalgo.