El Instituto Hidalguense de Educación (IHE), a través de la Dirección General de Acompañamiento Socioemocional y Educativo, ha subrayado la relevancia de las emociones en el desarrollo integral de niñas y niños de educación básica. En el contexto educativo, la comprensión y gestión de las emociones se consideran esenciales para el bienestar de los estudiantes y la construcción de un entorno escolar saludable y respetuoso.

El IHE, alineado con el Marco Local para la Convivencia Escolar en Hidalgo y los Protocolos para Prevenir, Detectar y Atender Casos de Acoso Escolar, Ciberacoso-Sexting, Maltrato Escolar y Violencia Sexual en Educación Básica, promueve un enfoque centrado en el bienestar emocional de los estudiantes. Estos lineamientos destacan la importancia de garantizar un ambiente de buen trato y seguridad para todos los integrantes de la comunidad educativa, y reconocen que las emociones juegan un papel crucial en la vida cotidiana de los estudiantes.

Comprender las Emociones: Un Reto Interdisciplinario

Desde el IHE se enfatiza que, aunque las emociones como la alegría, el enojo y la tristeza son comunes, su comprensión profunda aún es objeto de estudio en diversas disciplinas como la psicología, la pedagogía, la filosofía y la neurociencia. Estas disciplinas buscan desentrañar lo que sucede en el cerebro y el cuerpo al experimentar diferentes emociones, así como el por qué de dichas experiencias.

Las emociones no solo influyen en la supervivencia y adaptación de las personas, sino que también son fundamentales en la manera en que se interactúa con el entorno escolar. La capacidad de gestionar y controlar las emociones es una habilidad vital que los estudiantes deben desarrollar, y que se fomenta desde las aulas con el apoyo de docentes y profesionales en acompañamiento socioemocional.

El Desencadenante Emocional: Clave para la Gestión Emocional

Un aspecto central en el manejo de las emociones es la identificación de los desencadenantes emocionales, es decir, los factores que provocan una reacción emocional. Según la Dirección General de Acompañamiento Socioemocional y Educativo del IHE, cada persona debe aprender a identificar y comprender sus propios desencadenantes para interpretar y gestionar adecuadamente sus emociones. Esto implica detenerse a reflexionar sobre los pensamientos y situaciones que generan determinadas emociones y abordarlas de manera racional y realista.

La identificación y gestión de los desencadenantes emocionales no solo permiten un mejor control emocional, sino que también contribuyen a una convivencia escolar más armoniosa y a la formación de estudiantes emocionalmente inteligentes y resilientes.

El Impacto de las Emociones en la Vida Escolar

Las emociones, al estar presentes en todas las facetas de la vida escolar, influyen directamente en el rendimiento académico, las relaciones interpersonales y el bienestar general de los estudiantes. Un buen manejo emocional facilita el aprendizaje, mejora la convivencia en el aula y fomenta un ambiente de respeto y colaboración.

El IHE, consciente de la importancia de estas competencias, sigue trabajando para integrar el acompañamiento socioemocional en el currículo educativo, asegurando que tanto docentes como estudiantes cuenten con las herramientas necesarias para gestionar de manera efectiva sus emociones.