Nicolás Maduro llama a la persecución de manifestantes en medio de protestas por su reelección
Por:
Jair Velazquez
07 de agosto de 2024, a las 18:13
Foto de: Nicolás Maduro
Frente a una multitud desde el balcón del Palacio de Miraflores, el presidente venezolano Nicolás Maduro proclamó con vehemencia: "¡Vamos por ellos!". Esta declaración se da en un contexto de creciente tensión social tras su controvertida reelección, denunciada como fraudulenta por la oposición.
Hasta la fecha, más de 2,200 personas han sido detenidas en relación con las protestas que estallaron luego de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) anunciara la victoria de Maduro con un 52% de los votos frente al 43% del opositor Edmundo González Urrutia. La oposición, liderada por la inhabilitada María Corina Machado, ha calificado las elecciones como un fraude masivo.
Medidas Represivas y Delaciones Anónimas
Maduro ha instado a sus seguidores a delatar a quienes participen en "actos violentos" durante las manifestaciones, denominándolos "terroristas". En un esfuerzo por identificar y detener a los manifestantes, el gobierno ha implementado una aplicación móvil y una línea telefónica de la Dirección de Contrainteligencia Militar (DGCIM) para recibir denuncias anónimas.
"¡Háganme la denuncia de los delincuentes fascistas para irlos a buscar! ¡Voy a proteger al pueblo calle por calle, barrio por barrio!", exclamó Maduro ante sus seguidores.
Las protestas en Caracas y otras ciudades han escalado, resultando en al menos 24 muertos según organizaciones de derechos humanos. Las manifestaciones han incluso afectado a barrios pobres, históricamente bastiones del chavismo. En estos lugares, la represión ha sido particularmente severa.
En los calabozos de la Policía Nacional en Caracas, familiares de los detenidos esperan noticias. Una mujer, que pidió anonimato, relató cómo su hermano fue arrestado tras una protesta. "Llegó la policía y se los llevó", dijo. "Fueron casa por casa tocando la puerta (...) Ya nos da miedo hacer declaraciones, nos da miedo que nos paren en la calle".
Detenciones Arbitrarias y Violaciones a Derechos Humanos
La ONG Foro Penal, defensora de los "presos políticos", denuncia detenciones arbitrarias masivas, incluyendo a más de un centenar de menores de edad. Gonzalo Himiob, vicepresidente del Foro Penal, indicó que muchas detenciones han ocurrido en las casas de los manifestantes, basadas en delaciones. "Es la instalación del miedo como herramienta de control social", afirmó Himiob.
El general Elio Estrada Paredes, comandante de la Guardia Nacional, celebró la "acción contundente" de la Fuerza Armada. "Hemos logrado llegar a la casa de estos traidores una vez que han cometido hechos vandálicos", declaró.
Aplicaciones y Herramientas de Denuncia
El gobierno ha habilitado una pestaña en la aplicación móvil VenApp para denunciar a "guarimberos" (manifestantes en bloqueos de calles). Aunque la aplicación fue bloqueada en las tiendas de Google y Apple, Maduro aseguró que "más de 5,000 amenazas" reportadas por esa vía han sido "atendidas". La DGCIM también ha habilitado una línea telefónica para denuncias, conocida como "Operación Tun Tun", haciendo referencia al sonido de la puerta cuando la autoridad toca para hacer arrestos.
Activistas denuncian que grupos en plataformas de mensajería también son utilizados para delaciones. Durante una protesta opositora, una joven portaba un cartel pidiendo "libertad para Jesús Aguilar ¡y todos los detenidos!", refiriéndose a un manifestante arrestado en Guarenas, cerca de Caracas.
Miedo y Autocensura
El miedo a la represión ha llevado a muchos a borrar el contenido de sus celulares para evitar ser acusados. "Hay mucho miedo (...). Muchas personas se niegan a reportar sus casos", dijo Himiob. El temor a represalias es tan grande que incluso aquellos que han sido víctimas directas prefieren mantenerse en silencio.
La situación en Venezuela sigue siendo crítica, con una creciente tensión social y una administración que emplea medidas drásticas para mantener el control. Las violaciones a los derechos humanos y las detenciones arbitrarias son solo algunos de los desafíos que enfrenta la población en su lucha por la libertad y la justicia.