La distancia no es el olvido …

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Repudiamos los actos de rapiña que nos dieron una mala imagen ante el mundo
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Los acapulqueños queremos la oportunidad de trabajar en la reconstrucción
Los problemas de salud que se pueden derivar de la acumulación de basura y la descomposición, incluso del agua, son el problema actual detrás de la destrucción, la falta de empleos y suministros para rehabilitar las construcciones destruidas, es el conflicto cuyo impacto prevalecerá por mucho tiempo en Acapulco, tras el paso del Huracán Otis, advierte Bernardo Acevedo, acapulqueño de nacimiento y residencia, quien tuvo dejarlo todo en el Puerto para sobrevivir con su familia en el Estado de México.
“Entre mis familiares, amigos, vecinos, todos tuvimos afectaciones en nuestras casas, de una u otra manera, se cayeron tinacos, se rompieron las ventanas y no tenemos dinero para la reconstrucción de nuestras viviendas” cuenta con gran pesar, uno de los miles de acapulqueños que vivieron el paso de Otis y los días posteriores en medio de la tragedia.
Bernardo se dedicaba al mantenimiento de edificios, trabajo que en el Acapulco antes de Otis era bien socorrido, pues al ser un lugar inminentemente turístico, tener en buenas condiciones los espacios para recibir a los visitantes resulta fundamental, sin embargo ahora ni siquiera han recuperado la energía eléctrica en su totalidad para poder realizar trabajos.
“Yo lo que pido a las autoridades de los tres niveles de gobierno, es que nos den la oportunidad a los acapulqueños, de poder trabajar en la reconstrucción, que calculamos se va a llevar mínimo dos años para que se vuelva a levantar, ese tiempo, lo que dure, que nos den empleo” enfatizó.
Añadió que por supuesto quiere regresar a Acapulco, el lugar donde nació, creció y donde también nacieron sus hijas, pero en este momento no es posible, porque hace falta mucha ayuda, además de las que ha dado la sociedad civil y gobiernos como el de Hidalgo que ha enviado suministros, equipos de especialistas y mantiene abiertos los centros de acopio.
Bernardo Acevedo hizo votos porque el apoyo para la población guerrerense afectada por el huracán sea de largo plazo, que no cese, por quienes permanecen con muchas dificultades en el puerto y por quienes quieren regresar, pues a la distancia no olvidan su terruño, sus pertenencias, sus vidas como las construyeron en la Perla del Pacífico.
Lamentó que en medio de la tragedia, así como se han dado millones de manifestaciones de solidaridad, también muestren su ambición algunas personas que se aprovechan para encarecer los precios de insumos básicos, hasta en un 70 por ciento según cifras de la Asociación Nacional de Comerciantes en Pequeño.
REPUDIAMOS LA RAPIÑA
“Si no hubiera habido ese saqueo, quizá las tiendas hubieran abierto más rápido, nos hubiéramos organizado mejor para poder subsistir, pero desafortunadamente muchos aprovecharon la situación para sustraer elementos que ni siquiera son de necesidad prioritaria” puntualizó.
“No se vale, porque nos dejan también ante el mundo, como que los acapulqueños somos unas personas que no tenemos ética, que no tenemos moral y no todos somos así, repudiamos la rapiña, los acapulqueños buenos, que somos los más, sólo queremos que Acapulco se levante” remató.
Crédito: Juan Carlos Santamaría